Sí, hablamos del primer “donut” de la historia, el roscón de Reyes, pero ¿sabías que el origen de este delicioso dulce no tiene nada que ver con esta celebración? Realmente proviene de la época romana y sus fiestas saturnales, que como su propio nombre indica, estaban dedicadas al dios Saturno. Tenían el objetivo de que el pueblo romano en general pudiera celebrar los días más largos que empezaban a venir tras el solsticio de invierno. Para estos festejos se elaboraban unas tortas redondas hechas con higos, dátiles y miel, que se repartía por igual entre plebeyos y esclavos. Esta tradición fue experimentando cambios con el paso del tiempo. Luis XV era un enamorado de esta receta y fue propagando el rosco con una moneda en su interior entre la nobleza y así llegó a España, de la mano de los borbones. Pronto la costumbre pasaría de los nobles al pueblo llano, siendo Madrid y Sevilla importantes baluartes de esta obra maestra de la repostería.
De hecho, en Madrid podemos decir que se elaboran algunos de los más deliciosos roscones artesanos. Hoy os queremos ofrecer algunas alternativas que estamos seguros de que os encantarán.
– Una pastelería de las de toda la vida, el Horno de San Onofre elabora los roscones a la manera tradicional con ingredientes de primera calidad y emplea trigo no transgénico. Además, los hay para todos los gustos, desde el tradicional, con fruta escarchada, almendra y azúcar, pero también puedes elegirlo relleno de avellanas, crema tostada, nata con vino de Málaga y pasas, trufa o cabello de Ángel.
– Otro de los maravillosos roscones de Madrid lo puedes encontrar en la Antigua Pastelería del Pozo. Destaca por su esponjosidad, su olor a agua de azahar y su decoración minimalista, solamente lleva almendra molida y azúcar. ¡Ideal para los detractores de las frutas escarchadas!
– La pastelería La Marina es experta en roscones de Reyes, de hecho, es su especialidad y las enormes colas que se forman para comprarlos lo corrobora. Tienen un precio elevado pero merece la pena el disfrute de este manjar. Masa finísima y un ligero punto de sal que le da gracia. Ausencia de esencias. Como único adorno almendra y azúcar
– La Duquesita que abrió en 1914 en la calle Fernando VI, fue adquirida en diciembre de 2015 por el maestro Oriol Balaguer que ha mantenido la fama de sus roscones, que se elaboran durante todo el año. En este obrador te llevarás un roscón caliente y recién hecho al momento. Además, pronto abrirán su tienda online.
– Pero la innovadora Mamá Framboise tampoco se queda atrás y para darle un toque de modernidad a este dulce de siempre, apuesta por sorprender al cliente con nuevos sabores como es el caso del de frambuesa. También dispone del clásico, de chocolate y apricot. Solo se hacen por encargo, pero hay una versión mini (3 €) siempre lista para probar con un chocolate caliente o un café.
Hay muchos más pero seguramente no estarán tan buenos. No dejéis de encargar un roscón en cualquiera de estas pastelerías y disfrutad de un día tan especial como es el de la llegada de los Reyes Magos de Oriente. Os garantizamos que en nuestro hotel descansaréis plácidamente durante la espera.
